La ejecución sigue siendo el punto ciego y España repite notas mediocres en la evaluación global sobre presupuestos | Civio
El Gobierno vuelve a obtener una puntuación pobre en la Open Budget Survey, la encuesta global que evalúa y compara la calidad de la información presupuestaria de 120 países bajo criterios de transparencia, participación y vigilancia.
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Dos puntos clave han llevado al Estado español a repetir los pobres resultados de ediciones anteriores de la Open Budget Survey: la escasez de transparencia presupuestaria, sobre todo en la ejecución, lo que de verdad se acaba gastando; y la falta de mecanismos para que la ciudadanía participe en la planificación y ejecución del gasto público.