En la magnífica Biblioteca Nacional de Oslo se encuentra un libro de tapas duras y café, cuya primera página está repleta de publicidad.
Es el registro de toda la información básica tributaria de toda la gente que vivía en la región de Oslo en 1918: nombres, direcciones, ingreso anual y la cantidad de impuestos pagada.
Como le dijo a la BBC Einar Lie, profesor de Historia Económica de la Universidad de Oslo, esta práctica es tan antigua como el país mismo.
"El primer impuesto estatal que tuvimos fue poco después de que Noruega fuera fundada como nación. Solía ser parte de Dinamarca hasta la Guerra Napoleónica", explicó Lie.