Estudiar muestras del elemento químico europio incrustado en cristales de circón resulta una manera curiosa de averiguar cómo era la corteza terrestre hace millos de años.
Gracias a un nuevo estudio que tiene este enfoque, podemos deducir que nuestro planeta era mayormente llano, que la corteza era más delgada que ahora, que probablemente no había ni siquiera montañas.