John Hattie confirma que ofrecer al alumnado una evaluación formativa es uno de los mayores potenciadores para un aprendizaje de éxito. En este sentido, la rúbrica es una de las herramientas que, junto a otras, puede ser de gran utilidad en el proceso de enseñanza y aprendizaje para medir en qué grado se van alcanzando las competencias o se van logrando avances significativos en el trabajo por proyectos. No obstante, el mayor valor que he experimentado cuando he utilizado la rúbrica ha radicado en su potencial para orientar al alumnado hacía dónde necesita dirigirse y qué camino ha de seguir para alcanzar la meta propuesta de modo satisfactorio.