Postrados en una silla de ruedas, ciegos, sordos o con miembros amputados, son personajes de cómic que luchan contra el mal pese a la dificultad añadida.
Los superhéroes de cómic nacen para ser referentes de los lectores más jóvenes. No son muchos, pero algunos de esos superhéroes hacen el bien a pesar de sufrir alguna discapacidad adquirida.
Ellos, probablemente, son los más inspiradores de todos los héroes del noveno arte, porque suponen un modelo a seguir, un ejemplo de cómo superar las adversidades para vivir una vida normal.