Durante más de cien años este lugar constituyó una plaza estratégica del ejército de los Estados Unidos. Por su posición dominante frente el océano Pacífico, luego del ataque japonés a Pearl Harbor, se instalaron baterías anti-aéreas. No muy lejos de donde escribo estuvieron emplazados los temibles misiles Nike, auténticos íconos de la Guerra Fría. Sin embargo, aquí nunca se hizo un disparo contra enemigo alguno.