El éxito de Trello desde el primer día se basó en su visualidad y simplicidad de implementación, cautivando al equipo y adoptando todos de forma voluntaria esta metodología de inmediato. Trello nos permite colaborar a diario de forma virtual en los proyectos conjuntos, pudiendo asignarnos tareas, conocer el estado de su progreso, mantener conversaciones, darnos feedback constante y ver finalmente aquellas que ya se han completado.