Enhorabuena. Acabas de terminar tu carrera. Ya eres un señor (o una señora) graduado. No sabes qué hacer con tu vida o, quizá, sí que lo sabes. Te sientes poderoso y piensas que te vas a comer el mundo después de todo el esfuerzo que has hecho para formarte en aquello que más te gustaba.
No sé qué reacción me hubiera generado leer algo como lo que vas a leer a continuación a tu edad. Quizá primero me hubiera mosqueado, porque yo también creía que era muy lista (y lo era), pero seguro que hubiera reflexionado, que es lo que se pretende, así que no me enrollo más y os dejo unos consejos para que empecéis con buen pie en vuestra vida profesional.