Recientemente, en el congreso de ciudades inteligentes en Barcelona, analicé y descubrí muchos de estos sensores, pero, ¿cómo funcionan estos guardianes invisibles de nuestros espacios?
La historia de los sensores de presencia se remonta a las primeras décadas del siglo XX, con desarrollos primitivos en tecnologías de detección. Sin embargo, fue en las últimas décadas cuando su uso se popularizó, gracias a los avances en miniaturización y eficiencia energética.