Durante años y años y años, un pequeño grupo de aplicaciones open source para la edición gráfica han intentado (muchas veces a duras penas) competir con las grandes herramientas del software privativo como las de Adobe.
Los nombres Gimp, Inkscape y Blender suelen ser los primeros que se mencionan a quienes buscan alternativas no solo de código abierto, sino gratuitas, y especialmente, que están disponibles en la plataforma Linux. Blender es una de las, o la herramienta open source más poderosa y conocida para la creación 3D, y ahora se acaba de hacer muchísimo mejor.