(2018\06\29) El Gobierno de Navarra cree que el informe sobre la alta velocidad del Tribunal de Cuentas Europeo (TCE) simplemente ha constatado una realidad: que el modelo de Tren de Alta Velocidad (TAV) sólo para pasajeros y a 350km/h, desgajado de los ejes estratégicos de Europa y que se ha impulsado en el Estado y en Navarra a golpe de propaganda política, es un modelo fallido. Casualmente, el que UPN y PSN “han defendido hasta hace no tanto” y que no han sido más que promesas incumplidas.

Así lo consideró ayer María Solana, consejera portavoz del Gobierno foral. Asumió que todavía no han podido estudiar a fondo el informe completo (hecho público el martes, de 109 páginas y en inglés). Pero en un primer acercamiento entienden que los auditores “denuncian que no se han hecho las cosas según los parámetros que la propia Unión Europea tiene establecidos”. “Un modelo como el que se ha llevado a cabo en el Estado español en muchos casos y como el que estaba previsto para Navarra no hace tanto”. El informe, realizado por 11 auditores, es demoledor.