En el siglo XXI, la humanidad tiene pendientes dos grandes cuestiones por resolver: la energía y el agua. Pensamos que estamos en una sociedad super protegida, pero la realidad es bien distinta. (...) El tema del agua y la energía siguen sin estar resueltos. Con el cambio climático, el actual desarrollo económico, el mal uso del agua y la contaminación hídrica hace que el agua esté en serios peligros. En los últimos veinte siglos, la población ha pasado de unos 200 millones de habitantes hasta los 7.200 actuales, lo que implica que cada vez hay menos agua disponible en el planeta azul. Se ha producido un gran desarrollo en la ingeniería hídrica. Se hacen embalses, canales, trasvases, se saca el agua de los acuíferos. En los últimos 65 años se han construido dos embalses al día. Se han pasado de los 5.000 embalses existentes en 1950 a los 55.000 en 2014. Pero nada es suficiente, pues tenemos unos mil millones de personas que carecen de agua en condiciones.