La promoción o publicidad de efectos adelgazantes sigue estando prohibida, aunque no lo parezca: el R.D. 1907/1996 y un par de Sentencias. | Escepticismo y pensamiento crítico | Scoop.it
La confrontación del tenor literal de las normas con la constatación subjetiva de la generalización de ciertas conductas provoca a veces estupor. Se pueden poner muchos ejemplos, ya lo hemos hecho alguna vez, pero no parece que haga demasiada falta. Hay veces que la incompatibilidad con el ordenamiento se pone de manifiesto de manera abrupta tras un periodo de tolerancia, cuando cierta interpretación es precisa. El estupor se produce cuando no hace falta interpretación alguna. Esto pasa con la cuestión de la promoción del adelgazamiento.