n francés se le conoce como “La main à la pâte”, que en castellano significa trabajo práctico colaborativo y equivale a “poner manos a la obra”. Esta es un

Hola: Compartimos un interesante artículo sobre "Aprendizaje de los Estudiantes - 20 Principios Psicológicos para Mejorarlo" Un gran saludo.   Visto en: noticias.universia.es | Imagen vista en: uan.edu.mx Acceda al artículo desde: AQUÍ   También debería revisar: 12 Principios Pedagógicos para Transformar la Práctica Docente Enfoque por Competencias - Fundamentos y Principios Clave 5 Principios…

El veredicto del profesor suena inapelable. “Su rendimiento, sus resultados , son insatisfactorios. No asimila bien. Las notas donde apunta sus

Ciudad de México, 26 feb (SinEmbargo).- Para el experto en educación chileno Pablo Menichetti, "cualquier estudiante puede ser excelente". Bien analizado tiene el tema en el libro de reciente aparición Aprendizaje inteligente (Grijalbo), por medio del cual intenta revelar herramientas y técnicas probadas que han asistido a miles de estudiantes en Latinoamérica y Singapur. La educación es un tema sobre el que muchos sostienen tener una teoría eficaz y Menichetti, quien a menudo es presentado como "el coach educacional" más importante del continente", no es la excepción. El maestro certificado en Programación Neurolinguística, nacido en 1973 en Santiago de Chile, coincide con dicha apreciación, haciendo la salvedad de que "es muy fácil tener una teoría, lo más difícil es tener una práctica". Residente en Singapur durante cinco años, país el que es considerado por muchos el país número 1 en educación, Menichetti afirma que "el gran problema es ver cómo los padres ayudamos a nuestros hijos, cómo los profesores hacemos de nuestros estudiantes los mejores y esto hacerlo en el día a día, en la práctica, no en esas discusiones de intelectuales que no resuelven gran cosa". "Este libro lo escribí como un padre desesperado por ayudar a su hijo en los estudios y lo vi desde esa perspectiva siempre. En Singapur encontré las respuestas y eso es lo que básicamente hay mi trabajo", explica en entrevista con SinEmbargo. En 1965, Singapur era un país prácticamente de analfabetos. A casi 50 años más tarde, es el primero en la mayoría de los exámenes de medición educacional, los profesores cobran lo mismo que un abogado o un ingeniero y su sistema se basa en la meritocracia: desde primer grado los niños son clasificados en un ranking por desempeño académico, lo que va creando una necesidad de superación. Uno de los secretos, aunque parezca absurdo, es el "poco" tiempo que los alumnos le dedican al estudio, demostrando con ello que no siempre la cantidad garantiza la calidad. Un alumno promedio en Singapur comienza su jornada escolar a las 7:20 de la mañana y concluye entre las 13 y 14 horas. Tienen seis asignaturas obligatorias. Cada materia se imparte seis veces a la semana como mínimo, con lo que se asegura que el alumno aprenda tres veces a la semana idiomas (12 horas semanales en total), matemáticas, humanidades, ciencia y el electivo (humanidades, matemáticas, ciencias, artes) que más le interese. La educación física se lleva a cabo a la tarde, pero enfocado en deportes que el alumno seleccione. Las tasas de abandono escolar son bajísimas. "Lo que ellos hacen es destacar la saturación informativa que padecen los estudiantes. En vistas de ello, el sistema educativo de Singapur se dedica a otorgarle a los jóvenes las herramientas necesarias para procesar esa información. Cómo sintetizar, cómo tomar apuntes. En mis tiempos de estudiantes, todo el mundo me decía que estudiara, pero nadie me decía cómo debía hacerlo", expresa Menichetti. SÉ QUE PUEDO, CREO QUE PUEDO Y LO LOGRARÉ Con el lema "Sé que puedo, creo que puedo y lo lograré", el experto está empeñado en combatir los problemas de aprendizaje que padece la mayoría de los estudiantes en Latinoamérica, haciendo hincapié en determinar las habilidades laborales que se le exigirá a los jóvenes en el futuro y mostrándose convencido de que lo importante en la educación es "elevar la confianza y la autoestima en los hijos y alumnos". En sus teorías y prácticas educativas el tema del placer por el conocimiento no está exento. "Todos los seres humanos hacemos y repetimos lo que nos causa placer y dejamos de hacer aquello que nos disgusta o nos crea problemas. Por lo tanto, el verdadero desafío para padres y maestros consiste en cómo hacer que los estudiantes disfruten con lo que hacen", afirma. "Por lo tanto hay que demostrar que se puede estudiar en forma entretenida y dinámica y no repitiendo las fórmulas como loro", agrega. [youtube pa2D40WTAkk] – Cuando usted dice que "los campeones no nacen, se hacen", ¿cree realmente que hay necesidad de hacer campeones? – Bueno, esa consigna no apunta a que todos tengamos que ser campeones, sino que apunta al hecho de que todos quieren ser campeones. La frase lo que quiere decir es: - Mira, si quieres ser campeón en cualquier área de la vida que te propongas, hay que trabajar mucho para ese objetivo. No es cierto que se nazca con esas cualidades. Y eso le da esperanzas a muchos jóvenes que quieren lograr metas y sueños. – ¿Descree entonces de los talentos naturales? – Por supuesto que hay talentos naturales, pero mi opinión es que esa cualidad constituye, siendo optimistas, el 30 % del éxito. El otro 70 % es trabajo duro. Diego Maradona, Lionel Messi, seguramente tuvieron y tienen talento natural para el futbol, pero sus éxitos están dados porque han ido todos los días a entrenar. Son los primeros que llegan al entrenamiento y son los últimos que se van. Siempre ha sido así en el caso de las personas exitosas. Por otro lado, hay mucha gente que tiene talento y jamás lo desarrolla. – ¿Cuál diría usted que es el principal problema que atraviesa nuestra educación? – El principal problema o por lo menos el que más me preocupa, es que no nos hemos dado cuenta de que el mundo cambió. Utilizamos todavía las técnicas de transmisión del conocimiento que datan del siglo XIX. Seguimos intentando que nuestros jóvenes absorban la información, cuando la realidad es que información es lo que sobra en nuestro mundo de hoy. Tenemos que desarrollar nuestro sistema de enseñanza generando habilidades para desarrollar esa información y no memorizarla. – ¿A qué cree que obedece el desinterés de los jóvenes por la educación: a una manera errada de impartir el conocimiento? – Diría que la principal causa de ese desinterés es una manera errada de enseñar, pensando en que los jóvenes tienen la obligación de aprender, en lugar de comprender que somos los educadores y los padres los que estamos obligados a hacer del conocimiento algo entretenido y dinámico, que esté en correspondencia con lo que los jóvenes están acostumbrados a vivir. El otro factor es que los padres deben asumir un rol protagónico en el tema y dejar de echarle la culpa al colegio de todos los males educativos que padecen sus hijos. – Los colegios a veces funcionan como depósitos de chicos… – Mi experiencia en las escuelas me ha demostrado que en las reuniones de padres siempre están los padres de los chicos a los que les va bien en los estudios. Nunca están aquellos cuyos hijos tienen problemas en los exámenes. – ¿Qué piensa de lo que ha pasado en Chile recientemente, con los estudiantes, las marchas y las reivindicaciones por una educación gratuita? – En principio me gusta que se ponga como prioridad el tema de la educación. El hecho de que la educación forme parte de la discusión política, siempre es bueno para la educación, ayuda a mejorarla. En mi país mucha gente tiene acceso a la educación, pero luego está ese tema de los créditos universitarios y no puede ser que salgas endeudado luego de terminar una carrera. Eso hay que mejorarlo. Por otro lado, aunque no entro mucho en el debate acerca de la educación pública o privada, lo cierto es que no creo que tenga que ser totalmente gratuita. Lo que hay que exigir, más que gratuidad, es calidad educativa. Creo en una enseñanza mixta, donde se le cobre algo a la gente que tiene dinero y nada a los que no lo tienen. – Usted, que siempre está atento a las nuevas técnicas educacionales, ¿qué ha descubierto en los últimos tiempos? – Descubrí que tecnología educacional no es una súper computadora, no es un iPad. Tecnología educacional es enseñarle a nuestros hijos, con los avances de la ciencia, a estimular la computadora más increíble que es el cerebro humano. Tecnología educacional es enseñarle a nuestros hijos a soñar y a que no tengan límites en esos sueños.

Abusar de esta sanción no tiene eficacia pedagógica ni educativa

¿Creeéis que todos los estudiantes son unos vagos? ¿Quizás los maestros deberían implicarse más en un proceso de aprendizaje auténtico?