La ciudad le rinde homenaje al cantante con una exposición
Nadie como él supo interpretar mejor el tango, un artista seductor y hecho a sí mismo que, como tantos otros, se dejó seducir por la magia de Nueva York, una ciudad que ahora le rinde homenaje con una exposición en la que recuerda su paso por la Gran Manzana, donde grabó varios de sus grandes éxitos y desde la que le cantó alguna vez a su Buenos Aires querido.
"Más allá del canto y el cine, de lo buen mozo y elegante que era, (Carlos) Gardel cautiva porque es un modelo que tiene que ver con el éxito logrado a través del esfuerzo personal, un músico que surgió de la nada y que aprendió a cantar y a tocar la guitarra solo" , dijo hoy a Efe Micaela Patania, comisaria de la muestra "Gardel in New York" , durante un recorrido antes de su inauguración.