La escuela debe formar en la competencia digital para participar en la sociedad del siglo XXI, con sus cambios en producción y consumos culturales, los nuevos formatos de representación (audiovisual, hipertextual, multimedia), adaptarse a saberes en continua transformación, con una pedagogía del aprender CREANDO (que tiene más de cien años, con referentes como Dewey, Montessori, Decroly, Vigotsky, Piaget, Freire y Freinet) y aprendizaje activo.