Subgrupo de Evaluación de resultados del Grupo de personas colaboradoras con la EPP del IAAP.
En la Evaluación de Resultados la medición de la eficacia y eficiencia adquiere importantes connotaciones para valorar las políticas públicas, de tal modo que una política pública eficaz y eficiente supone que la actuación pública ha logrado los impactos y resultados pretendidos en la planificación previa, con los medios y recursos apropiados y adecuados, y con el menor coste posible.
Desde la Ciencia Política, se estudia como las Políticas Públicas se encargan de implementar acciones públicas destinadas a superar las limitaciones e inconvenientes producidos por las necesidades y problemas que surgen en la sociedad y afrontar los retos futuros. Situaciones globales como la vivida en la pandemia actual ha propiciado que sea aún más necesario emprender mecanismos y protocolos que ayuden a evaluar mejor para gestionar de forma más inteligente y sostenible.
En este sentido, los términos anglosajones: Polity, Polities y Policy hacen referencia a las tres dimensiones que relacionan la política con el análisis de políticas públicas (dimensión material de la acción pública que supone los outputs del proceso, la dimensión interactiva o procesal que supone los inputs y la dimensión institucional o estructural que son los sistemas de organización política).
La evaluación de resultados es una herramienta de toma de decisiones ya que va a proporcionar información basada en evidencias, sobre los resultados obtenidos en el uso de los recursos públicos. Y para poder cumplir con tal objetivo es primordial conocer cuál es el plan o programa y cuáles son los objetivos a alcanzar.
Para ello, dentro del Grupo de Personas Evaluadoras, el Subgrupo de Evaluación de Resultados del I.A.A.P., ha elaborado un instrumento práctico de carácter integral basado en el caso práctico del análisis de una política pública concreta (política social de protección a la infancia y adolescencia) y que se plasma en el libro publicado en la web del IAAP: Guía para realizar la Evaluación de Resultados de la Política Pública.
La guía pretende servir de herramienta a las administraciones públicas para valorar y medir la eficiencia y mejorar desempeño de la gestión pública, así como, fortalecimiento de la transparencia, rendición de cuentas y calidad del gasto público, algo que directamente repercute en la principal seña de un servicio público: obtener mayor bienestar ciudadano.
Esta guía de evaluación de resultados, además, pretende servir como instrumento metodológico para que la persona evaluadora elabore de forma sencilla y clara su propia hoja de ruta a seguir en el proceso de evaluar los resultados de la política pública que tenga encomendada. Es una guía que ayuda al estudio de la relación existente entre los resultados que se desean obtener, los resultados que efectivamente se consiguen y los resultados que espera la ciudadanía beneficiaria y usuaria de las medidas de la política pública o de los servicios públicos de que se trate.
Es una metodología que impulsa la cultura de la evaluación organizacional, y que pone tanto énfasis en los resultados como en los procedimientos y por supuesto, con gran interés en cómo se hacen las cosas. En este sentido, cobra mayor relevancia qué se hace, qué se logra y cuál es su impacto en el bienestar de la población, es decir, la creación de VALOR PÚBLICO.
La elaboración de esta guía ha supuesto un esfuerzo de año y medio en su gestión, de un subgrupo de trabajo del grupo de colaboradores en la evaluación que tiene constituido el IAAP, siendo el análisis de la propia evaluación de resultados de un plan estratégico andaluz: el II Plan de Infancia y Adolescencia 2016-2020 (II PIAA) lo que ha facilitado extrapolar la práctica real evaluativa al método de trabajo que desde aquí se defiende.
La guía contiene una parte introductoria de la evaluación de resultados que presenta esta experiencia como novedosa en la Junta de Andalucía.
Un capítulo primero en donde se da énfasis a la participación, al permitir este método a las personas implicadas en la política pública correspondiente, participar activamente en todas las fases y procesos de evaluación de una determinada política. Y lo más significativo es que se realiza a través del aprendizaje compartido, participación activa y observación participante.
Un capítulo segundo que presenta esta metodología como un método de evaluación sumativa a lo largo de cinco fases diferenciadas (conocer, comprobar, cooperar, compartir y comunicar) (Metodología de las 5 C) con sus respectivas actuaciones o tareas por cada fase.
Un capítulo tercero que sistematiza las actuaciones del proceso de evaluación de resultados realizadas durante el periodo de octubre de 2020 a mayo de 2021 relativo a la evaluación del II PIAA por el equipo evaluador del IAAP. Un capítulo cuarto con la propuesta de unas fichas modelo que ayuden a la persona evaluadora a elaborar la evaluación de resultados de cualquier política pública, que además han sido elaboradas y extraídas de la propia praxis: la evaluación del II PIAA.
Y finalmente las conclusiones y recomendaciones que se extrapolan de la experiencia práctica del subgrupo de evaluación de resultados del grupo de personas evaluadoras que ha recibido el encargo de definir esta metodología.
Pero, la cuestión es ¿por qué evaluar resultados? Los resultados obtenidos tras la implementación de una política pública proporcionan información acerca de si ha cumplido con los logros propuestos o no. Por esta razón, esta metodología para evaluar los resultados facilita información para seguir adelante con la política tal como se diseñó, realizar reformulaciones para adaptar la política a la realidad que se quiere transformar, mejorar o eliminar o bien sustentar la base de una nueva política, como ejemplo, la práctica de la evaluación de resultados del II PIAA ha proporcionado gran información para elaborar el diagnóstico del futuro III Plan de Infancia y Adolescencia.
Es un hecho que las evaluaciones de resultados pueden realmente contribuir a la mejora de las políticas públicas y al fortalecimiento de la corresponsabilidad, puesto que evaluar los resultados implica perseguir tres propósitos claves: contribuir al aprendizaje organizativo, a la toma de decisiones y rendición de cuentas.
Para conocer más sobre la evaluación de resultados, le recomendamos consultar la "Guía para realizar la evaluación de resultados de las políticas públicas"
Desde la Federación Española de Municipios y Provincias se pone en marcha esta formación a finales del mes de noviembre, destinada a cargos electos, personal directivo y técnico de entidades locales.